Si creías que hacer una pizza casera era complicado, espera a descubrir esta receta. Hoy te traigo una versión original, saludable y deliciosa: pizza con masa de espinaca. Esta masa no solo le da un color verde vibrante a tu plato, también incorpora verduras de forma natural y sin esfuerzo. Ideal para cualquier comida en familia, una cena entre amigos o simplemente cuando te apetece comer algo rico y distinto.
Incorporar espinaca a la masa es más fácil de lo que parece. Y lo mejor es que no necesitas ser un experto para lograr una pizza crujiente por fuera, tierna por dentro y cargada de sabor. Vamos paso a paso para que no se te escape ningún detalle.
Por Qué Te Encantará Esta Receta
Beneficios Clave
Hay muchas razones para enamorarse de esta pizza:
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Es saludable sin sacrificar el sabor. Gracias a la espinaca, aporta fibra, hierro y un toque vegetal que la hace perfecta para todos, incluso los que no son fans de las verduras.
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Fácil de preparar. La masa se hace en un solo bol y no necesitas utensilios sofisticados.
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Perfecta para personalizar. Puedes añadir tus toppings favoritos: desde mozzarella y tomates secos hasta champiñones o jamón serrano.
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Ideal para toda la familia. A los niños les encanta el color y ni notan que están comiendo verduras.
Ideal Para
Esta receta es muy versátil. Es perfecta para:
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Una cena informal entre semana.
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Preparar con los peques, ya que pueden amasar y estirar la masa contigo.
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Quienes siguen una dieta más ligera o quieren incluir más vegetales sin complicaciones.
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Invitados vegetarianos (solo asegúrate de elegir toppings sin carne).
Ingredientes Para la Pizza con Masa de Espinaca
Ingredientes Base
Aquí tienes los ingredientes que necesitarás para hacer la masa desde cero. La mayoría seguro que ya los tienes en casa:
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600 g de harina de trigo
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2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
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1 cucharada de sal fina
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200 g de espinaca cocida, bien escurrida y picada
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10 g de levadura seca o 50 g de levadura fresca
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Agua tibia (la cantidad justa para ligar la masa)
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Salsa para pizza (la que más te guste: tomate, blanca, pesto)
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Queso rallado y toppings a tu elección
Sustituciones y Consejos
No te preocupes si no tienes todos los ingredientes exactos, aquí van algunas alternativas y recomendaciones útiles:
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Harina: Puedes usar harina integral para un resultado más rústico y con más fibra. También puedes mezclar mitad de harina de trigo con mitad de harina de avena.
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Espinaca: Si no tienes espinaca fresca, la congelada funciona igual de bien. Solo asegúrate de escurrirla perfectamente para que la masa no quede húmeda.
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Aceite: El de oliva da mejor sabor, pero si solo tienes de girasol, también sirve.
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Levadura: Si usas levadura fresca, desmenúzala y disuélvela antes en un poco de agua tibia para activarla mejor.
La Mejor Espinaca Para la Masa
Lo ideal es usar espinaca fresca, cocida solo un minuto en agua hirviendo para conservar su color intenso y su sabor suave. Luego escúrrela bien (apretándola incluso con las manos) y pícalas finamente.
¿Tienes espinaca congelada en casa? También sirve. Solo recuerda descongelarla por completo y escurrirla muy, muy bien. Si queda con agua, la masa se volverá pegajosa y difícil de trabajar.
Otro truco: si tienes un procesador, puedes triturarla con una cucharada de agua y mezclarla directamente con la harina para que se integre mejor.
Utensilios de Cocina Que Necesitarás
Imprescindibles
No hace falta tener una cocina profesional. Con unos pocos utensilios básicos, lo tienes todo para triunfar:
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Un bol grande para preparar la masa
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Cuchara de madera o espátula
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Rodillo o simplemente tus manos para estirar la masa
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Bandejas o pizzeras para hornear
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Paño limpio para cubrir la masa mientras reposa
Opcionales (pero útiles)
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Papel de horno para evitar que la masa se pegue
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Cortador de pizza para servir porciones iguales
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Procesador de alimentos para picar más fino la espinaca
Cómo Hacer Pizza con Masa de Espinaca
Ahora viene la parte divertida: ponernos manos a la masa. No te preocupes, te guiaré paso a paso para que nada falle. Vas a ver que es mucho más sencillo de lo que imaginas. Esta receta no solo tiene un resultado delicioso, también es muy entretenida de preparar.
Paso 1: Preparar la Masa
Comienza colocando la harina en un bol grande y haz un hueco en el centro, como una corona. En ese centro, añade la levadura (seca o fresca, según la que uses), la espinaca picada y el aceite de oliva. La sal, muy importante, colócala por los bordes para que no toque directamente la levadura, ya que puede interferir con su acción.
Empieza a añadir agua tibia poco a poco, mientras mezclas con las manos o una cuchara de madera. No te apresures: es mejor agregar el agua de a poco para no pasarte. Cuando se forme una masa, llévala a una superficie limpia y comienza a amasar.
Amasa durante al menos 10 minutos. Sí, diez. Es la clave para conseguir una masa elástica, lisa y fácil de trabajar. Si se pega un poco, espolvorea con harina, pero sin pasarte.
Paso 2: Dejar Leudar
Forma una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente aceitado. Cúbrela con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante unos 40 minutos o hasta que duplique su tamaño.
Un truco: si hace frío en casa, puedes poner el bol cerca del horno (apagado) o en el interior con solo la luz encendida. También puedes calentar ligeramente el horno (unos segundos), apagarlo y meter la masa adentro. Le encantará ese clima templado.
Paso 3: Formar la Base de Pizza
Cuando la masa haya levado bien, divídela en dos porciones iguales (o más, si prefieres hacer minipizzas). Espolvorea ligeramente tu superficie de trabajo con harina y estira cada porción con las manos o con rodillo, dándole forma redonda o rectangular, según tu bandeja.
Colócala sobre una pizzera o bandeja para horno ligeramente aceitada. No hace falta que quede perfecta, lo casero también tiene su encanto.
Paso 4: Prehornear
Precalienta el horno a 200 °C. Lleva las bases al horno durante unos 7 a 10 minutos. El objetivo aquí no es que se doren por completo, sino que se cocinen lo justo para poder soportar los ingredientes sin ablandarse después.
Verás que la masa cambia de textura: se vuelve más firme al tacto y ligeramente inflada. Sácalas y deja que se enfríen un poco.
Paso 5: Añadir Salsa e Ingredientes
Aquí empieza la parte creativa. Unta tus bases con la salsa para pizza que prefieras. Puede ser una clásica de tomate, una blanca tipo bechamel o incluso un pesto suave. Luego añade tus toppings: queso mozzarella, champiñones, cebolla morada, jamón, aceitunas… lo que te apetezca.
No sobrecargues la pizza: menos es más cuando se trata de lograr una cocción pareja y una base crujiente.
Paso 6: Hornear la Pizza
Vuelve a colocar la pizza en el horno, esta vez durante unos 10 a 15 minutos, o hasta que veas que el queso está fundido y burbujeante, y los bordes dorados.
Si tu horno tiene grill, puedes encenderlo los últimos 2 minutos para un acabado más dorado y crujiente en la parte superior.
Paso 7: Servir y Disfrutar
Una vez fuera del horno, deja reposar la pizza unos 5 minutos antes de cortarla. Esto permite que los sabores se asienten y sea más fácil de manejar. Luego, corta en porciones y sirve caliente. Acompáñala con una ensalada fresca o simplemente tal cual. Lo único que necesitas ahora es una buena compañía.
Consejos Para el Éxito
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No te saltes el amasado. Amasar bien es lo que hace que la masa sea elástica y aireada.
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Escurre bien la espinaca. Cuanto menos agua, mejor textura tendrá la masa.
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Controla la temperatura del agua. Si está muy caliente, matará la levadura; si está muy fría, no activará el levado.
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No abuses de los toppings. La masa de espinaca es ligera, y si la cargas demasiado, puede volverse blanda.
Cómo Conservar la Pizza con Masa de Espinaca
A Temperatura Ambiente
Si te sobra pizza y la quieres dejar fuera del refrigerador, consúmela en un plazo máximo de 12 horas. Cúbrela bien con papel aluminio o film para evitar que se seque.
En el Refrigerador
Puedes guardar las sobras en la nevera hasta 3 días, siempre en un recipiente hermético. Para recalentarlas, usa el horno o una sartén con tapa para mantener la base crujiente.
Congelación
La masa (ya prehorneada) se puede congelar durante un mes. Envuélvela bien en papel film y luego en una bolsa. Cuando quieras usarla, ponla directamente al horno con toppings, sin descongelar.
Preguntas Frecuentes (FAQs)
¿Puedo usar espinaca congelada?
Claro que sí. Solo asegúrate de descongelarla por completo y escurrirla muy bien. Puedes apretarla con las manos o usar un colador fino.
¿Se puede hacer la masa sin gluten?
Sí, puedes sustituir la harina de trigo por una mezcla sin gluten. Asegúrate de añadir una cucharadita de goma xantana para mejorar la elasticidad.
¿La pizza tiene sabor a espinaca?
La espinaca aporta un toque muy suave. La mayoría de las veces, ni se nota, especialmente si usas una buena salsa y queso fundido.
¿Se puede dejar la masa lista con antelación?
Por supuesto. Puedes dejarla en el refrigerador después del primer levado, bien tapada, hasta 24 horas. Sáquela una hora antes de usar para que recupere temperatura ambiente.
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Conclusión
Esta pizza con masa de espinaca es todo lo que una buena receta casera debe ser: fácil, deliciosa, diferente y perfecta para compartir. Ya sea que la prepares para una comida entre semana o como plan de fin de semana, es una opción que sorprende por su sabor y color. Anímate a probarla, personalízala a tu gusto y, sobre todo, disfruta cada paso del proceso. Nos encantará saber cómo te ha quedado.
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Pizza con Masa de Espinaca
- Tiempo Total: 45 minutos
- Raciones: 4 porciones 1x
- Dieta: Vegetariana
Descripción
Una receta deliciosa y nutritiva para preparar pizza con masa de espinaca desde cero. Perfecta para comidas familiares o cenas ligeras.
Ingredientes
- 600 g de harina de trigo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de sal fina
- 200 g de espinaca cocida, escurrida y picada
- 10 g de levadura seca o 50 g de levadura fresca
- Agua tibia, cantidad necesaria
- Salsa para pizza al gusto
- Queso rallado y toppings a elección
Instrucciones
- Mezcla los ingredientes secos y húmedos en un bol formando una masa suave.
- Amasa durante 10 minutos hasta que quede lisa y elástica.
- Deja reposar la masa en un bol aceitado hasta que duplique su tamaño (40 minutos).
- Divide la masa en dos partes y estírala sobre bandejas aceitada.
- Prehornea las bases a 200°C durante 7-10 minutos.
- Añade la salsa y los ingredientes de tu elección.
- Hornea 10-15 minutos más hasta que el queso esté derretido y los bordes dorados.
- Deja reposar y sirve caliente.
Notas
- Usa espinaca fresca o congelada bien escurrida.
- Evita que la sal toque directamente la levadura.
- Puedes congelar la base prehorneada para futuras preparaciones.
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de Cocción: 25 minutos
- Categoría: Plato principal
- Método: Horneado
- Cocina: Italiana
Nutrición
- Tamaño de la Porción: 1 porción
- Calorias: 300
- Azúcar: 3 g
- Sodio: 420 mg
- Grasas: 10 g
- Grasas Saturadas: 3 g
- Grasas Insaturadas: 7 g
- Grasas Trans: 0 g
- Carbohidratos: 42 g
- Fibra: 4 g
- Proteínas: 9 g
- Colesterol: 12 mg
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