Pollo Crujiente Estilo KFC

July 23, 2025

¿Alguna vez soñaste con preparar en casa ese pollo crujiente estilo KFC que todos aman? Buenas noticias: no solo es posible, sino que también es mucho más fácil de lo que imaginas. Con esta receta, te voy a guiar paso a paso para lograr ese rebozado crujiente, dorado y lleno de sabor, y un interior jugoso que se deshace en la boca.

Este plato es perfecto para una comida especial de fin de semana, una cena en familia o incluso para sorprender a tus amigos con algo irresistible. Lo mejor es que no necesitas ingredientes exóticos ni técnicas complicadas. Solo ganas de cocinar y disfrutar.

Por Qué Te Encantará Esta Receta

Beneficios Clave

Lo primero que notarás es esa textura crujiente que se siente desde el primer mordisco. Es el tipo de receta que transforma cualquier cena en un verdadero festín.

Crujiente por fuera, jugoso por dentro: gracias a la marinada con leche y especias, el pollo conserva su humedad sin sacrificar textura.
Sabor auténtico: el secreto está en las especias, que puedes ajustar a tu gusto, para lograr un resultado muy cercano al original.
Sin complicaciones: no necesitas ingredientes extraños ni máquinas especiales.
Perfecto para compartir: esta receta está pensada para ser disfrutada en grupo.

¿Para Quién Es Ideal?

Esta receta no está pensada solo para expertos en la cocina. De hecho, está diseñada para que cualquiera pueda prepararla con éxito.

Si estás empezando a cocinar, no te preocupes: el proceso es sencillo y te explicaremos cada paso con claridad.
¿Tienes niños en casa? Les encantará el sabor y la textura.
También es ideal si quieres evitar los aditivos y conservantes de los productos industriales.
Y si eres fan del pollo frito estilo americano, esta receta va a ser tu nueva favorita.

Ingredientes para Pollo Crujiente Estilo KFC

Vamos a dividir los ingredientes por partes, para que no te pierdas. Y si no tienes uno de ellos, no pasa nada: te cuento cómo sustituirlos.

Ingredientes Principales

Para la marinada (tempura líquida):

8 muslos de pollo
300 g de harina de trigo
350–400 ml de leche entera
Sal y pimienta negra al gusto
1 cucharada de cada una de las siguientes especias (ajústalas a tu gusto):
- Orégano seco
- Pimentón (dulce o picante)
- Curry
- Ajo en polvo
- Cebolla en polvo

Para el rebozado seco (la capa crujiente):

100 g de harina de trigo
½ cucharadita de cada especia que hayas usado en la tempura

Para freír:

Abundante aceite vegetal

Sustituciones y Consejos

¿No tienes leche entera? Puedes usar suero de leche (buttermilk), que le da un toque más tierno al pollo. También puedes mezclar leche con una cucharada de zumo de limón y dejar reposar 10 minutos como sustituto rápido.
Si no te gusta el curry, puedes probar con comino o una mezcla de especias tipo barbacoa.
El pimentón ahumado también da un sabor espectacular si buscas algo con más carácter.
Usa harina sin gluten si necesitas adaptar la receta para celíacos.

Un consejo importante: asegúrate de que todas las especias estén bien mezcladas con la harina. Esto es lo que va a dar ese sabor tan característico en cada bocado.

La Mejor Parte del Pollo para Esta Receta

Aunque puedes hacer esta receta con cualquier parte del pollo, los muslos son la mejor opción. Tienen la cantidad justa de grasa para mantenerse jugosos durante la fritura y soportan bien el tiempo de cocción necesario para lograr una capa crujiente perfecta.

Si prefieres algo más magro, puedes usar pechuga, pero te recomiendo cortarla en tiras y no cocinarla demasiado para evitar que se seque.
Las alitas también funcionan muy bien, especialmente para aperitivos o picoteo.
¿Quieres una versión sin hueso? Puedes deshuesar los muslos, lo que facilita comerlos con las manos y es ideal si piensas hacer sándwiches con ellos.

Utensilios de Cocina Recomendados

Tener los utensilios adecuados no solo te facilita el trabajo, sino que también ayuda a que el resultado sea el mejor posible.

Indispensables

Un bol grande para mezclar la marinada.
Una sartén honda o una olla profunda para freír con seguridad.
Papel absorbente o una rejilla de enfriado para eliminar el exceso de aceite.
Pinzas de cocina, para manejar el pollo sin quemarte.
Un termómetro de cocina (opcional, pero muy útil para controlar el aceite).

Opcionales pero útiles

Una batidora manual, que te ahorrará esfuerzo al mezclar la marinada.
Cucharas medidoras, para dosificar bien las especias.
Una bolsa con cierre hermético para empanizar sin ensuciar mucho.

Cómo Hacer Pollo Crujiente Estilo KFC Paso a Paso

Aquí viene la parte que más emociona: ¡cocinar! No te preocupes si es tu primera vez haciendo pollo frito, esta guía está pensada para que lo consigas a la primera. Vamos paso a paso, como si estuviéramos cocinando juntos en la misma cocina.

Paso 1: Prepara la Tempura (Marinado líquido)

La clave del pollo jugoso está aquí. La marinada no solo le da sabor, sino que también mantiene la carne tierna durante la fritura.

En un bol grande, mezcla 300 g de harina de trigo con una cucharada de cada especia que hayas elegido. Asegúrate de que estén bien repartidas para que cada bocado tenga sabor.
Añade sal y pimienta negra al gusto.
Poco a poco, ve incorporando la leche entera (entre 350 y 400 ml) mientras mezclas con un batidor de mano. La textura ideal es líquida pero con cuerpo, como una masa para pancakes que se adhiera al batidor, pero que caiga sin esfuerzo.
Salpimienta ligeramente los muslos de pollo.
Sumerge completamente los muslos en la mezcla y asegúrate de que queden bien cubiertos.
Cubre el bol con film transparente y deja reposar en el frigorífico durante al menos 1 hora. Si puedes, déjalo 4 horas o más: el sabor se intensifica y el pollo queda más tierno.

Consejo: Si vas a cocinar para una ocasión especial, puedes dejar el pollo marinando desde la noche anterior.

Paso 2: Prepara el Rebozado Seco

Este paso es lo que va a crear esa capa extra crujiente y dorada que todos amamos. Es fácil, pero hay un par de trucos.

En un plato hondo, mezcla 100 g de harina de trigo con ½ cucharadita de cada especia que usaste en la tempura.
Mezcla bien para que el sabor quede uniforme en cada trozo.

Tip de experto: Si quieres que el rebozado tenga más textura, puedes añadir una pizca de maicena a la mezcla de harina. Eso ayuda a formar grumos que quedan crujientes al freír.

Paso 3: Reboza y Fríe el Pollo

Este es el momento de transformar el marinado en una costra crujiente irresistible. Solo sigue estos pasos y no fallarás.

Saca los muslos del frigorífico. No los escurras completamente. Esa mezcla húmeda ayuda a que el rebozado se adhiera mejor.
Pasa cada muslo por la mezcla de harina con especias, presionando ligeramente para que se formen grumos crujientes.
Calienta abundante aceite vegetal en una sartén honda o freidora. La temperatura ideal es de 170–180 °C.
¿No tienes termómetro? Lanza un poco de masa al aceite. Si burbujea al instante, está listo.
Fríe los muslos en tandas pequeñas para que no baje la temperatura del aceite.
Cocina entre 10 y 12 minutos, dándoles la vuelta si es necesario. Estarán listos cuando tengan un tono dorado intenso y estén bien cocidos por dentro.
Retira y coloca sobre papel absorbente o una rejilla para eliminar el exceso de aceite.

No tengas prisa: El secreto de un buen pollo frito es una cocción lenta y pareja. Deja que se cocine bien por dentro sin quemarse por fuera.

Consejos para el Éxito

Preparar un buen pollo frito no es complicado, pero estos consejos pueden marcar la diferencia:

No sobrecargues la sartén. Si pones muchos muslos de golpe, el aceite bajará de temperatura y el pollo absorberá más grasa.
Reboza justo antes de freír. Si lo haces con antelación, el pollo puede humedecer el rebozado.
Usa pinzas de cocina para manipular el pollo sin romper la capa crujiente.
Controla la temperatura del aceite. Si está demasiado caliente, el exterior se dorará antes de que el interior se cocine.
Deja reposar el pollo frito unos minutos antes de servir. Así la costra se asienta y no se reblandece.

Cómo Conservar el Pollo Crujiente Estilo KFC

¿Te sobró pollo? Excelente. Te cuento cómo guardarlo y recalentarlo para que no pierda ese toque crujiente.

A Temperatura Ambiente

Solo se recomienda dejarlo fuera durante un máximo de 2 horas. Pasado ese tiempo, es mejor refrigerarlo para evitar riesgos sanitarios.

En el Refrigerador

Guarda el pollo en un recipiente hermético. Dura entre 3 y 4 días.
Para recalentarlo, nunca uses el microondas si quieres que quede crujiente. Mejor llévalo al horno o a la sartén con un poco de aceite.

En el Congelador

Congela los trozos una vez estén completamente fríos.
Envuélvelos en papel aluminio o colócalos en una bolsa hermética.
Duran hasta 2 meses sin problema.
Para recalentarlos, lo mejor es usar el horno a 180 °C durante 15–20 minutos o una air fryer.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

¿Puedo usar otra parte del pollo?

Sí. Las pechugas en tiras funcionan muy bien, especialmente para una versión tipo “tenders”. Solo vigila el tiempo de cocción para que no queden secas.

¿Qué tipo de aceite es mejor?

El aceite de girasol o el aceite vegetal neutro son ideales por su sabor suave y alto punto de humo. Evita el de oliva virgen extra, ya que puede amargar al calentarse demasiado.

¿Se puede hacer esta receta al horno o en air fryer?

Sí, aunque el resultado no será igual de crujiente. En horno, precaliéntalo a 200 °C, coloca el pollo en una bandeja con rejilla y hornea 25–30 minutos. En air fryer, cocina a 190 °C durante 15–18 minutos, rociando previamente con un poco de aceite.

¿Puedo prepararlo sin gluten?

Absolutamente. Usa harina sin gluten y revisa que las especias no contengan trazas. También puedes experimentar con harina de arroz o mezcla para tempura.

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Conclusión

Ahora que ya conoces todos los pasos, consejos y trucos, estás más que listo para preparar el mejor pollo crujiente estilo KFC en tu propia cocina. Es una receta perfecta para compartir, sorprender o simplemente darte un gusto.

Lo mejor es que puedes adaptarla a tu gusto, experimentar con las especias y hacerla tan picante o suave como prefieras.