Compartir

¿Hay algo más reconfortante que el aroma del bacalao al horno con cebolla pochada y pimientos recién hechos? Esta receta de Bacalao con Pimientos a la Portuguesa es justo eso: un plato tradicional lleno de sabor, perfecto para compartir en familia o sorprender a tus invitados en una ocasión especial.

Aquí te guiaré paso a paso, como si estuviéramos cocinando juntos en tu cocina. No necesitas ser un chef profesional para preparar este clásico portugués: con ingredientes simples y técnicas fáciles, vas a conseguir un plato digno de aplausos. Lo mejor de todo es que puedes personalizarlo según tus gustos, sin perder su esencia casera y mediterránea.

¿Por Qué Te Encantará Esta Receta?

Beneficios Clave

Esta receta no solo es sabrosa, también es muy versátil. El bacalao, al estar ligeramente enharinado y frito antes de hornear, queda jugoso por dentro y con un exterior ligeramente dorado. Los pimientos, cocinados con mimo, aportan dulzor natural y una textura perfecta. Y si decides incluir patatas, conseguirás un plato completo y redondo.

Además, puedes adaptarla fácilmente: ¿prefieres evitar el ajo? No pasa nada. ¿Quieres un toque más picante? Añade un poco de guindilla. La receta es flexible, y eso la hace aún más especial.

¿Para Quién es Ideal?

Este plato es perfecto para todos. Si estás empezando en la cocina, el proceso es muy asequible. Si ya tienes experiencia, puedes disfrutar afinando sabores o presentaciones. También es una excelente opción si sigues una dieta mediterránea, ya que el plato es rico en verduras y utiliza aceite de oliva virgen extra.

Y como tiene ese aire festivo sin ser complicado, es ideal para celebraciones como Semana Santa, comidas familiares o incluso una cena de domingo.

Ingredientes para Bacalao con Pimientos a la Portuguesa

Ingredientes Esenciales

• Bacalao desalado (800–1000 g en lomos): la estrella del plato. Si usas bacalao salado, recuerda desalarlo bien (más adelante te cuento cómo).

• 3 cebollas grandes: cortadas en juliana, aportan dulzor y textura al conjunto.

• 2 pimientos verdes y 1 rojo: en tiras, para un contraste de sabores y colores.

• 3–4 patatas medianas (opcional): si quieres convertirlo en un plato único, son la base perfecta.

• 4 dientes de ajo (opcional): para los que no pueden resistirse a ese toque aromático.

• 1 cucharadita de pimentón dulce: imprescindible para darle profundidad al sabor.

• Harina: solo una fina capa para sellar el bacalao antes de freír.

• Aceite de oliva virgen extra: de buena calidad, porque se nota.

• Sal al gusto y perejil fresco picado: para terminar con un toque de frescura.

Sustituciones y Consejos

• ¿No tienes bacalao? Puedes usar merluza o incluso filetes de abadejo. Aunque el sabor cambia, la técnica se mantiene.

• ¿Sin harina? Usa maicena o fécula de patata si buscas una versión sin gluten.

• ¿No te gusta el ajo? Puedes omitirlo o reemplazarlo por ajo en polvo si prefieres un sabor más suave.

• ¿Pimientos asados en lugar de frescos? También funcionan, aunque la textura será más blanda. Perfecto si buscas un toque más meloso.

El Mejor Bacalao para Esta Receta

Si puedes conseguir bacalao salado de calidad, vale totalmente la pena. El proceso de desalar requiere tiempo, sí, pero el resultado es insuperable: una carne firme, con un punto salino justo y una textura que se deshace en láminas.

Cómo desalarlo correctamente:

• Colócalo en un recipiente con agua fría, dentro de la nevera.

• Cambia el agua cada 6–8 horas.

• Mantén el proceso entre 36 y 48 horas según el grosor.

Si prefieres algo más rápido, el bacalao ya desalado que venden en bandejas también es válido, pero fíjate en la etiqueta: evita los que vienen muy manipulados o con aditivos.

Un truco: sécalo bien con papel de cocina antes de enharinar. Así se dorará sin soltar agua.

Utensilios de Cocina Necesarios

Imprescindibles

• Sartén amplia: para pochar las verduras sin que se amontonen.

• Bandeja de horno o fuente apta para horno: debe ser lo bastante grande para colocar todos los ingredientes en capas.

• Cuchillo bien afilado y tabla de cortar: te facilitarán muchísimo el trabajo.

Útiles Adicionales

• Mandolina: para cortar patatas más uniformes si decides incluirlas.

• Espátula o pinzas de cocina: para manejar el bacalao sin romperlo.

• Rallador fino o prensador de ajo: si quieres un ajo bien integrado.

Cómo Hacer Bacalao con Pimientos a la Portuguesa

Ahora que ya tienes todos los ingredientes listos y sabes qué utensilios necesitas, llega el momento más emocionante: cocinar. No te preocupes si es tu primera vez con una receta como esta. Te voy a guiar paso a paso con todos los detalles para que el resultado sea un plato jugoso, sabroso y digno de repetir una y otra vez. Vamos a hacerlo juntos.

Paso 1 – Preparar el Bacalao

Si estás usando bacalao salado, lo primero es desalarlo correctamente. Este paso es clave, así que tómate tu tiempo:

1. Colócalo en un recipiente grande con agua fría.

2. Guarda en la nevera y cambia el agua cada 6–8 horas.

3. Mantén el proceso entre 36 y 48 horas según el grosor de los lomos.

Una vez desalado, sécalo bien con papel de cocina. Luego, pásalo ligeramente por harina. Este pequeño gesto ayuda a que el bacalao se selle en la sartén y conserve su jugosidad en el horno.

Paso 2 – Pochar las Verduras

Corta las cebollas en juliana fina y los pimientos en tiras. Aquí no hay prisa: el secreto está en el fuego medio y la paciencia.

1. En una sartén grande, añade aceite de oliva y sofríe la cebolla con una pizca de sal. Deja que se cocine lentamente unos 15 minutos, removiendo de vez en cuando.

2. Cuando esté tierna y ligeramente dorada, añade el pimentón dulce fuera del fuego y remueve para integrarlo. Este paso es importante para que el pimentón no se queme ni amargue.

3. En otra sartén, sofríe los pimientos con un chorrito de aceite. No hace falta que queden blandos del todo, lo ideal es que mantengan algo de textura.

Reserva ambas preparaciones por separado.

Paso 3 – Freír el Bacalao y las Patatas (opcional)

Calienta aceite en una sartén y dora los lomos de bacalao 1–2 minutos por cada lado. No buscamos que se cocinen completamente, solo que se sellen por fuera y adquieran ese bonito color dorado.

Si decides incluir patatas:

1. Pélalas y córtalas en rodajas gruesas.

2. Fríelas en aceite caliente hasta que estén doradas por fuera pero tiernas por dentro.

3. Escúrrelas sobre papel absorbente.

Las patatas son opcionales, pero añaden una base deliciosa y convierten el plato en una comida completa.

Paso 4 – Montar el Plato

Aquí empieza la parte más divertida, montar las capas como si armaras un pequeño festín:

1. Precalienta el horno a 180 °C.

2. En una fuente para horno, coloca primero las patatas si las estás usando.

3. Encima, acomoda los lomos de bacalao.

4. Cubre generosamente con la cebolla pochada y su jugo.

5. Por último, reparte los pimientos por encima. Si te gusta el ajo, este es el momento de añadirlo laminado por encima de todo.

Paso 5 – Hornear

Introduce la bandeja en el horno y hornea durante 15–20 minutos. El tiempo puede variar un poco según el grosor del bacalao. Sabes que está listo cuando el pescado se ve jugoso, y las verduras están bien integradas y algo doradas.

Al sacarlo del horno, espolvorea con perejil fresco picado. Ese toque final de color y frescura hace que el plato luzca espectacular.

Consejos para el Éxito

• No sobrecocines el bacalao. Aunque parece resistente, el bacalao se seca si se pasa de horno. Menos tiempo es mejor.

• Pocha las cebollas sin prisa. Cuanto más tiempo las cocines a fuego bajo, más dulces y suaves quedarán.

• No escatimes en aceite de oliva virgen extra. Es un plato que se apoya en ingredientes simples, así que la calidad del aceite marca la diferencia.

• El pimentón siempre fuera del fuego. Así no se quema ni amarga, y mantiene todo su aroma.

Cómo Conservar Bacalao con Pimientos a la Portuguesa

A Temperatura Ambiente

Este plato se puede mantener fuera del frigorífico unas 2 horas máximo. Después de ese tiempo, guárdalo en frío para evitar que se estropee.

En la Nevera

En un recipiente hermético, el bacalao con pimientos se conserva perfectamente entre 2 y 3 días. Puedes recalentar en horno o sartén para que mantenga su textura.

En el Congelador

Sí, puedes congelarlo sin problema. Lo mejor es dividirlo en porciones individuales, bien envueltas en film y luego en un recipiente. Para recalentar, déjalo descongelar en la nevera y luego caliéntalo en horno o sartén a fuego medio.

Preguntas Frecuentes

¿Puedo hacer esta receta con otro pescado?

Claro. Aunque el bacalao es el clásico, puedes usar merluza, abadejo o incluso salmón si buscas algo diferente. Solo ten en cuenta que el sabor y la textura cambiarán ligeramente.

¿Qué pasa si no tengo pimentón dulce?

Puedes usar pimentón ahumado, aunque aportará un sabor más intenso. También puedes prescindir de él si lo prefieres, aunque te perderás ese toque característico.

¿Se puede preparar con antelación?

Sí, y de hecho muchos dicen que mejora con el reposo. Puedes dejarlo montado en la bandeja y hornearlo justo antes de servir. O cocinarlo entero y recalentarlo al día siguiente.

¿Las patatas son imprescindibles?

No, pero son un gran complemento. Si buscas algo más ligero, puedes omitirlas sin problema o sustituirlas por una guarnición de arroz o ensalada verde.

Recetas Relacionadas

Si te ha gustado esta receta de Bacalao con Pimientos a la Portuguesa, te recomendamos probar también:

• Bacalao con salsa de gambas y pimientos del piquillo: un plato lleno de sabor del mar.

• Pescado a la plancha: una receta sencilla y sabrosa: ideal para quienes buscan una opción ligera.

• Espaguetis con gambas y champiñones al ajillo: una combinación deliciosa para días especiales.

Conclusión

Preparar Bacalao con Pimientos a la Portuguesa en casa es mucho más sencillo de lo que parece, y el resultado es de los que se recuerdan. Es un plato lleno de tradición, perfecto para compartir y con el que seguro vas a sorprender.

Anímate a probarlo, cuéntame cómo te quedó y no dudes en hacerlo tuyo con pequeños toques personales. Esta receta está pensada para disfrutarla, desde que empiezas a cocinar hasta que ves los platos vacíos en la mesa.

Print

Compartir