¿Alguna vez has soñado con preparar una tarta de queso suave, cremosa y perfecta… sin tener que encender el horno ni usar gelatina? Esta receta de tarta de queso sin horno y sin gelatina es justo lo que necesitas. Fácil, rápida y con una textura tan irresistible que nadie notará lo sencilla que ha sido prepararla. Ideal para el verano, para sorprender en una comida familiar o simplemente para darte un capricho sin complicarte la vida.
Por Qué Te Encantará Esta Receta
Beneficios Clave
Hay muchas razones para enamorarse de esta tarta. Aquí te dejo las más importantes:
-
Sin horno: no necesitas complicarte con temperaturas o tiempos de cocción.
-
Sin gelatina: perfecta si quieres evitar ingredientes animales o simplemente no tienes gelatina a mano.
-
Textura ultra cremosa: gracias al mascarpone y la nata, el relleno es suave y aireado.
-
Fácil y rápida: en menos de media hora ya tienes tu tarta montada (aunque necesita reposar en la nevera, lo duro ya estará hecho).
-
Apta para todos los niveles: incluso si es tu primera vez haciendo postres, esta receta es para ti.
Ideal Para…
Esta tarta es perfecta en muchas situaciones:
-
Celebraciones familiares: cumpleaños, reuniones o comidas especiales.
-
Cenas de verano: ligera, fresca y sin horno.
-
Personas con poco tiempo: se prepara en minutos.
-
Cocineros principiantes: cero complicaciones, cero estrés.
-
Dietas sin gelatina: sin necesidad de sustituir ni adaptar nada.
Ingredientes para la Tarta de Queso Sin Horno y Sin Gelatina
Ingredientes Principales
Aquí va la lista de lo que necesitas. Todo fácil de encontrar y probablemente ya tengas la mayoría en casa:
Para la base:
-
150 g de galletas tipo María
-
55 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
-
400 g de queso crema (preferiblemente mascarpone)
-
200 ml de nata para montar (mínimo 35% M.G.)
-
120 g de azúcar
-
Ralladura de limón o esencia de vainilla (opcional)
Estos ingredientes básicos combinan a la perfección para darte un postre equilibrado en sabor y textura.
Sustituciones y Consejos
¿No tienes alguno de los ingredientes? Te doy algunas alternativas sin perder la esencia de la receta:
-
Galletas María: puedes usar galletas digestive, de mantequilla o incluso integrales para un toque diferente.
-
Mantequilla: si buscas una versión sin lactosa, puedes usar margarina vegetal.
-
Queso crema: el mascarpone es ideal por su suavidad, pero también funciona bien el tipo Philadelphia o similares. Incluso puedes mezclar con un poco de yogur griego para aligerar la textura.
-
Aromatizantes: si no tienes limón, unas gotas de vainilla o incluso un poco de canela pueden dar un toque personal.
El Mejor Queso para Esta Tarta de Queso
Aunque puedes usar varios tipos de queso crema, hay algunos que destacan más que otros.
-
Mascarpone: sin duda, el favorito por su cremosidad y sabor neutro. No empalaga y da una textura muy suave.
-
Philadelphia (o similar): más fácil de encontrar, algo más ácido, pero excelente para conseguir cuerpo en el relleno.
-
Otras opciones: si buscas una versión más ligera, puedes usar requesón bien batido o queso crema light. Para una tarta vegana, existen opciones vegetales de buena calidad que también funcionan.
Un consejo: deja que el queso repose unos minutos fuera de la nevera antes de batirlo, así conseguirás una textura mucho más sedosa.
Utensilios de Cocina Que Necesitarás
No necesitas una cocina equipada como la de un chef profesional, pero sí algunos básicos.
Imprescindibles
-
Molde desmontable de 20-22 cm
-
Papel de hornear para cubrir la base
-
Bol grande para mezclar
-
Varillas manuales o batidora eléctrica
Opcionales (pero útiles)
-
Espátula de silicona para alisar el relleno
-
Manga pastelera si quieres hacer decoraciones con nata
-
Cuchara medidora o báscula de cocina (para mayor precisión)
Tener los utensilios adecuados te ahorra tiempo y mejora el resultado. Pero no te preocupes si no tienes todo, esta receta es muy flexible.
Cómo Hacer la Tarta de Queso Sin Horno y Sin Gelatina
Vamos paso a paso. Te prometo que no tiene pérdida y el resultado es de pastelería.
Paso 1 – Preparar la Base
-
Tritura las galletas hasta que queden como migas finas. Puedes usar una picadora o meterlas en una bolsa y machacarlas con un rodillo.
-
Añade la mantequilla derretida y mezcla bien hasta que se integre por completo.
-
Forra la base del molde con papel de hornear y vierte la mezcla. Presiona firmemente con una cuchara o con el fondo de un vaso para formar una capa uniforme.
-
Opción extra: si quieres una base más firme, hornea 10 minutos a 180 °C. Si prefieres evitar el horno, simplemente refrigérala 30 minutos mientras preparas el relleno.
Paso 2 – Preparar el Relleno
-
En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que la mezcla esté suave y sin grumos.
-
En otro recipiente, monta la nata hasta que esté firme (picos suaves). No te pases batiendo o se puede cortar.
-
Incorpora la nata montada al queso con movimientos envolventes. Hazlo poco a poco y con delicadeza para no perder el aire que le da esa textura esponjosa.
-
Añade la ralladura de limón o unas gotas de esencia de vainilla si quieres darle un toque aromático.
Paso 3 – Montaje y Reposo
-
Vierte la mezcla de queso sobre la base ya fría.
-
Alisa bien la superficie con una espátula.
-
Cubre el molde con papel film y lleva al frigorífico por un mínimo de 8 horas. Lo ideal es dejarla toda la noche para que tome cuerpo.
La espera es la parte más difícil… pero vale totalmente la pena.
Consejos para el Éxito
-
Usa ingredientes fríos pero no helados: la nata debe estar muy fría para montar bien, pero el queso crema conviene que esté a temperatura ambiente para batir sin grumos.
-
No batas en exceso: especialmente la nata. Si te pasas, se convierte en mantequilla.
-
El reposo es clave: mínimo 8 horas en la nevera. Si puedes, 12 mejor.
-
Molde desmontable = éxito asegurado: facilita muchísimo el desmoldado.
-
Para cortar bien: pasa un cuchillo por agua caliente antes de cada corte. Te saldrán porciones perfectas.
Cómo Conservar la Tarta de Queso Sin Horno y Sin Gelatina
Una vez que has preparado tu tarta de queso sin horno y sin gelatina y la has dejado reposar el tiempo necesario, llega la parte más importante después del montaje: conservarla correctamente. Así no solo mantienes su frescura, sino también esa textura cremosa que tanto nos gusta. Aquí te explico cómo hacerlo paso a paso según cada situación.
A Temperatura Ambiente
Aunque pueda parecer cómodo dejarla fuera de la nevera, esta tarta no debe estar mucho tiempo a temperatura ambiente, sobre todo por la nata y el queso crema.
-
Solo déjala fuera mientras se sirve.
-
Máximo: 1 hora sobre la mesa, especialmente si hace calor.
-
Después de servir, vuelve a refrigerarla lo antes posible.
Si vas a llevarla a una comida o picnic, usa una nevera portátil o una bolsa térmica para transportarla.
En el Refrigerador
La tarta de queso sin horno y sin gelatina se conserva de maravilla en la nevera. De hecho, los sabores se integran mejor con el paso de las horas.
-
Guarda la tarta en el mismo molde, cubierta con film transparente o una tapa hermética.
-
También puedes pasarla a un recipiente cerrado si ya la has cortado.
-
Duración: hasta 5 días sin perder calidad.
-
Antes de servir, sácala 10 minutos antes para que recupere un poco de temperatura y se intensifiquen los sabores.
Consejos para Congelar
¿Te ha sobrado tarta o quieres dejar porciones listas para más adelante? Congelarla es una opción excelente si lo haces correctamente.
-
Corta la tarta en porciones individuales.
-
Envuelve cada trozo en film transparente y luego en papel de aluminio o colócalos en una bolsa hermética.
-
Congela hasta por 1 mes sin problema.
-
Para descongelar, simplemente pasa la porción al frigorífico la noche anterior. No uses el microondas para evitar que la textura se vuelva líquida o se corte.
Un truco extra: si vas a congelar, evita añadir toppings frescos antes. Mejor decora justo antes de servir.
Preguntas Frecuentes (FAQs)
¿Se puede hacer esta tarta sin nata?
Sí, aunque el resultado será diferente. La nata aporta volumen y aire, así que si la omites puedes usar yogur griego muy espeso o incluso una crema vegetal para montar. La textura será más densa, pero igualmente deliciosa.
¿Cuánto tiempo necesita realmente en la nevera?
Lo mínimo recomendado son 8 horas, pero si puedes dejarla toda la noche, mucho mejor. Cuanto más tiempo repose, más firme y sabrosa estará. Así que si puedes planificarla de un día para otro, ¡hazlo!
¿Qué tipo de queso crema es mejor?
El mascarpone es el más recomendado por su textura suave y sabor neutro. Sin embargo, también puedes usar queso tipo Philadelphia o cualquier queso crema para untar con cuerpo. Evita los que son demasiado líquidos o bajos en grasa, ya que afectan la firmeza.
¿Qué decoraciones le quedan bien?
La versatilidad de esta tarta es una de sus mejores cualidades. Algunas ideas:
-
Frutas frescas: fresas, arándanos, frambuesas o rodajas de kiwi.
-
Mermeladas: de frutos rojos, albaricoque o naranja.
-
Cacao o canela en polvo espolvoreados antes de servir.
-
Chocolate derretido en hilos por encima.
-
Incluso puedes cubrir con una capa ligera de coulis de frutas o caramelo salado.
Recetas Relacionadas
Si te ha gustado esta tarta de queso sin horno y sin gelatina, prueba también estas delicias dulces:
-
Tarta de queso y yogur al microondas: una opción rápida y ligera.
-
Pastel de avena, manzana y zanahoria: ideal para un postre más saludable.
-
Bizcochuelo para torta esponjoso: perfecto para quienes buscan una base más tradicional.
-
Postre fácil y delicioso de leche: otra alternativa sin horno.
-
Budín de pan sin horno: clásico, reconfortante y sin complicaciones.
Conclusión
La tarta de queso sin horno y sin gelatina es mucho más que una receta fácil: es ese postre que te saca de apuros, que gusta a todos y que se adapta a cualquier ocasión. No necesitas ser experto en repostería, ni usar ingredientes complicados. Solo seguir unos pasos simples y dejar que el frío haga su magia.
¿Te animas a probarla? Cuéntame cómo te ha quedado, si la has decorado a tu manera o si te inventaste una nueva versión. Lo mejor de la cocina casera es compartir y disfrutar juntos. Así que guarda esta receta, prepárala en tu próxima celebración… y deja que todos se sorprendan.
Print
Tarta de Queso Sin Horno y Sin Gelatina
- Tiempo Total: 35 minutos + refrigeración
- Raciones: 8 porciones 1x
- Dieta: Vegetariana
Descripción
Una tarta cremosa y refrescante elaborada sin horno ni gelatina, ideal para cualquier ocasión y fácil de preparar.
Ingredientes
- 150 g de galletas tipo María
- 55 g de mantequilla derretida
- 400 g de queso crema (tipo mascarpone)
- 200 ml de nata para montar (35% M.G.)
- 120 g de azúcar
- Ralladura de limón o esencia de vainilla (opcional)
Instrucciones
- Tritura las galletas hasta obtener migas finas.
- Mezcla las migas con la mantequilla derretida y presiona en el fondo de un molde desmontable cubierto con papel de hornear.
- Refrigera la base durante 30 minutos o hornéala 10 minutos a 180 °C si prefieres mayor firmeza.
- Bate el queso crema con el azúcar hasta obtener una mezcla suave.
- Monta la nata hasta que esté firme.
- Incorpora la nata montada al queso crema con movimientos envolventes.
- Añade la ralladura de limón o la esencia de vainilla si lo deseas.
- Vierte el relleno sobre la base ya fría y alisa la superficie.
- Refrigera al menos 8 horas, preferiblemente toda la noche.
- Desmolda, decora al gusto y sirve fría.
Notas
- Usa ingredientes a temperatura adecuada: nata muy fría y queso crema a temperatura ambiente.
- Para una versión más ligera, puedes usar queso crema light.
- Evita montar en exceso la nata para que no se corte.
- Deja reposar mínimo 8 horas para mejor textura.
- Tiempo de preparación: 25 minutos
- Tiempo de Cocción: 10 minutos (opcional)
- Categoría: Postres
- Método: Sin hornear
- Cocina: Internacional
Nutrición
- Tamaño de la Porción: 100 g
- Calorias: 360 kcal
- Azúcar: 18 g
- Sodio: 150 mg
- Grasas: 27 g
- Grasas Saturadas: 16 g
- Grasas Insaturadas: 10 g
- Grasas Trans: 0.2 g
- Carbohidratos: 25 g
- Fibra: 0.4 g
- Proteínas: 5 g
- Colesterol: 85 mg
Palabras clave: tarta de queso sin horno, cheesecake sin gelatina, tarta fría de queso, postre sin horno